lunes, 14 de febrero de 2011

Concurso: Por un San Valentín diferente...

Mientras tus amigas y amigos se van a festejar el Día de los enamorados con sus respectivas parejas, te propongo algo más divertido: sacar tu pasado para siempre de tu vida.

Por eso largamos un nuevo concurso: mandá tu historia con tu ex y ganate un Boucher de 4 clases de pilates gratuitas en Hera Pilates y ejemplares de Matemos a los ex.

Los interesados deberán mandar su historia a matemosalosex@gmail.com, colocando en el asunto la palabra "Concurso" entre el 14/2 y el 18/2. El texto no deberá extenderse por más de una carilla. Se irán publicando de a uno por día, y cuando se haya finalizado, se abrirá una encuesta para que los lectores voten sus historias preferidas.

Las que tenga más votos ganarán los premios (el primer lugar los libros y el segundo, las clases). Por supuesto se puede hacer campañas en sus propios blogs o cuentas en redes sociales para movilizar a las masas.

Arranca la recepción de historias, para evitar desprolijidades sólo se tomarán en cuenta las historias que lleguen a esa casilla de correo bajo la consigna detallada (las que ya mandaron para publicar en el blog, no participan... o mandenlas otra vez bajo estas reglas).


Importante: Suspendido el evento de hoy, quienes quieran donar objetos de sus ex puede alcanzarlos a la calle Piedras 1326 CABA (entre el 14/2 al 18/2 de 10:00 a 14:00) que serán donados a Red Solidaria (los tendremos informados a través de la página de la Editorial y de los blogs).

viernes, 11 de febrero de 2011

Especial San Valentín...

Y otra vez llega el 14 de febrero en el calendario y me pregunto por qué me enojo si no creo en lo que éste día significa. Nadie sabe con exactitud a qué se debe el festejo, y si bien hay tres leyendas que intentan explicar la tradición, no hay acuerdos. ¿Entonces, por qué debería preocuparnos si ni siquiera tiene un origen concreto?


Con toda esta carga, comienzo a repasar mis distintos estados de ánimo con respecto a esta fecha y entro en una dicotomía digna de una Gata Flora del amor. Odio el Día de los enamorados, pero al parecer lo necesito de aliado si estoy en pareja. No creo que exista un solo día para demostrar el amor, pero si estoy sola parece que se acaba el mundo. A ver si así se entiende mejor…


Si estoy de novia espero un gesto, un saludo, una declaración de amor, regalos, flores y hasta bombones, aunque no me gusten. Ah, ¿por qué no un par de anillos? Qué lindo detalle. ¿A quién le propusieron casamiento un 14 de febrero? Qué romántico… Me releo y apesto, si siempre reniego de todo esto y no creo en San Valentín, ¿por qué espero una respuesta en un día que tildo de comercial?


Si estoy sola, se me derrumba el mundo, aunque intente disimularlo. ¿Por qué si el 13 de febrero era una persona alegre, el 14 caí en un pozo depresivo?, es una pregunta obligada. Y tiene una respuesta: porque el mundo me obliga a replantear mi estado civil. “Sos soltera, ¿no te da vergüenza?”, me tiran una y otra vez en la cara. Y yo, que venía piloteando bien mi separación y mi flamante soltería, empiezo a dudar porque ése día no podés ir a ningún lado sola. ¿Para qué, para sufrir?

Si entrás a un restaurante la decoración habitual mutó y ahora en lugar de un florero súper chic hay dos velas y pétalos de rosas sobre la mesa. “Sólo hacemos reservaciones para dos, si estás sola sentate en la barra”, te dice la moza que te atiende todas las semanas con su peor cara, con desprecio, como si no te conociese (seguro también es soltera), Si vas al cine, el escenario es mucho peor. No importa qué película elijas, en todas las salas vas a escuchar ruido a besos como único sonido ambiente. Si optás por salir a caminar para despejarte un rato, vas a ver hombres con ramos de flores que no son para vos, o parejas tomadas de la mano con cara de felicidad. Y recordás lo feliz que eras en pareja, y renegas por tu maldita rebeldía que nunca te permitió festejar una fecha tan rosa como ésta.


¿Y a mi qué me importa, si yo no creo en San Valentín? ¿Cómo un día normal, como cualquier otro del calendario, puede ponerme de tan mal humor? No existe una explicación concreta, pero sucede. A casi todas nos pasa, ¿o no?


Y vos que estás leyendo esto, ¿ya dejaste a tu ex en el pasado o lo seguís llamando compulsivamente, con la ilusión de encontrarlo con las defensas bajas y que acepte pasar el Día de los enamorados juntos? ¿Pero qué pretendes festejar, si ya te dijo que se le fue el amor? Tengo una idea mejor: agarrá todas las cosas que recuerden a tu ex, ponelas en una caja y donalas a una entidad de bien público. Matás dos pájaros de un tiro, erradicas todas las cosas que te recuerdan a él/ella y colaborás con alguien que lo necesita.


¿Cómo planeas pasar San Valentín?


Nota importante: Se suspende el evento del Corazonómetro planeado para el lunes 14 por cuestiones ajenas a la editorial y a mi persona. Mil disculpas a los que planeaban asistir.

jueves, 3 de febrero de 2011

Matando ex...

En el programa Informadísimos, que conduce Carlos Monti (pero aquí reemplazado por Tomy Dunster), por canal Magazine.







En Entre mujeres, la web para la mujer de Clarín

http://www.entremujeres.com/pareja-y-sexo/puede-amiga-ex_0_416958313.html




Lo que viene: Súper evento solidario Anti San Valentín, prepará el 14 de febrero en tu agenda, será un día inolvidable!

viernes, 21 de enero de 2011

Alguien va a morir...

Último momento:

Un estudió reveló que 28 millones de parejas se rompieron a causa de Facebook durante el 2010. Además, el 95 por ciento de los usuarios buscó al menos una vez a una ex pareja, lo que provocó reencuentros y varias separaciones.

¿Para qué? ¿Ustedes, buscaron a sus ex en Facebook?

lunes, 17 de enero de 2011

Por si alguien no se enteró...

Todos pero todos los ex del mundo, tiemblen. La noticia se expande en programas de radio y medios gráficos, cada vez son más los que conocen la existencia de este libro: ¡sus días están contados!

Acá algunas repercusiones:

Tapa de Cosmopolitan: "Vengate de tu ex"



La nota, con una foto bebé del libro


Revista Maru Botana (enero), con una columna de humor: "Me tocó un hombre con combo".


Diario Clarín, suplemento Buena Vida, viernes 7 de enero


Revista MIA (Editorial Perfil)


En éste link, verán una nota que escribí especialmente para la web destinada a la mujer de Clarín (pueden dejar comentarios) y acá, la nota que salió en la web del Argentino.



Por las librerías:

El afiche...



Mar del Plata, librería Polo Norte


Cruzamos el charco: Punta del este, librería Papacito

En el estante, en pesos uruguayos...


En la vidriera...



Habrá más novedades en este boletín. Los interesados pueden conseguirlo en cualquiera de éstos puntos de venta y si ya tienen su ejemplar, envíen su foto a Capitanitadelespacio@gmail.com

Gracias por apoyar la iniciativa... ¡Muerte a todos los malditos!

lunes, 10 de enero de 2011

Para muestra, sobra un botón...

Para los interesados que aún no pudieron reunirse con el libro, acá va un adelanto...



Hay una constante que se repite, una frase que une todas mis relaciones, unas tras otra: "Sos muy celosa". Injustamente, cada uno de los hombres que pasaron por mi vida intentaron justificar sus actos macabros detrás de esa falacia. Así me intentaban hacer creer que la loca paranoica era yo y que con ésa sola frase los iba a eximir de culpa y cargo. Nunca me comí el cuento. Cada vez que lo necesito voy a terapia a resolver mis problemas, no me tiren encima los suyos. Háganse cargo.


Las situaciones eran de lo más diversas, pero ahí estaban ellos para repetir el modelo. Para muestra, sobra un botón: "¿Nene, cómo puede ser que salgas todos los sábados con tus amigos?"... "Es normal, vos sos muy celosa"; "¡Pero te estás acostando con tu mejor amiga!"... "No exageres, vos sos muy celosa"; "¿Por qué tu compañera se quedó a estudiar toda la noche en tu casa?"... "Por favor, ¿qué tiene de malo? Vos sos muy celosa"; "¿Por qué agregas todos los días a alguna trola nueva al Facebook? Me revientan esas nenas que se sacan fotos en el baño, miran a la cámara haciendo trompita, se anudan la camiseta sobre el ombligo y direccionan el zoom desde arriba, para enfocarse de lleno las tetitas. ¿Todas tienen que ser tus amigas?"... "Podrían ser mis hijas (?). Vos sos muy celosa".


Basta, ¿no les enseñaron otro latiguillo? Ah sí, un par más conocen: histérica, exagerada, paranoica, desbordada y la más usada, la número uno, hincha pelotas. ¿Qué fácil sería la vida si cada vez que alguien me dice algo que me molesta la hago callar con un: "No seas hincha pelotas"? Qué liviano sería todo. Por favor, ¿ustedes pasan la noche en un cabaret barato con cuatro locas sentadas arriba de su falda y yo soy la loca?


En fin, este libro no es más ni menos que la coronación de mi catarsis que arrancó hace tres años en el blog Capitana del espacio, siguió en Matemos a los ex y ahora termina acá, con la creación de este libro. No se acaba la matanza, pero esta es la frutilla del postre, la posibilidad de inmortalizar parte de mi historia (y la de ustedes). Una forma extraña de hacer justicia por mano propia: Vos me jodiste tanto tiempo, tomá temblá, hasta que no leas el libro en su totalidad vas a estar con la cola entre las patas, ¿y si te nombro? ¿Y si lo lee tu nueva mujer y se entera de lo que realmente sos? Me encanta, sus miedos me vuelven loca de alegría.


No pienso parar, quiero invadir todo, sueño con que este libro llegue a todos lados y debo aclarar que no me mueve la ambición económica (nadie se volvió rico escribiendo un libro, salvo que en la tapa diga "Harry Potter y la piedranosecuanto", obviamente no es el caso). Mi motor es mucho más grande, la venganza es la gasolina que alimenta mis venas. Quiero que las ex parejas de cada una de las personas que mandaron su historia tengan miedo hasta el final, que deban leer el libro a escondidas de su nuevo entorno; que tengan que forrar la tapa con papel araña azul y ante la pregunta insistidora de su mujer: "¿Qué lees mi amor?", no sepan que contestar; y tengan que improvisar un insulso: "Nada importante, un manual que me dieron en el trabajo, tengo que estudiar para un nuevo curso".


Qué divertido, me los imagino encerrados en el baño con el libro entre las manos; o en los subtes camino al trabajo; o esperando que el semáforo se ponga en rojo para leer un poquito más. Ya escuchó el pum pum pum de sus corazones galopando a mil por minuto: ¿estaré o no estaré? ¿Esta guacha se animó a mandar nuestra historia? Y la guacha que sí se animó, ahora está sentada en una silla mecedora cruzada de brazos, esperando el tan ansiado llamado, con una sonrisa socarrona. "¿Usted es Fulanita? Su ex pareja acaba de ingresar a la guardia de un hospital, entró con palpitaciones, con el último aliento, pidió que por favor la llamemos a usted". Ay querido, se dieron vuelta los papeles, ahora estás comiendo de mi mano: "Dígale que no puedo ir, que tengo una vida fabulosa y que no puedo dejar de disfrutarla ni un minuto. Pero por favor, eso sí, hágale saber que me interesa que se mejore. Gracias señora por comunicarse y darme esta noticia tan preocupante".


Listo, no hay más vueltas. Se larga la maquinaria de venganza. Si logramos que, en algún lugar del mundo, al menos un ex sufra ése miedo incontenible, este libro valió la pena.

lunes, 3 de enero de 2011

MI ex, un gran consejero...

Paula, una cordobesa de 28 años, mandó su historia para que forme parte del libro Matemos a los ex. La compartimos también en el blog.



Llegó un momento del duelo en el que empecé a salir con otros hombres, a veces con más suerte que otras. Un par de noches volví desecha, me topé con cada tarado que me hacía recordar cuánto extrañaba a mi ex. A la distancia uno añora los buenos momentos, los inicios de la relación donde tan felices éramos y no podía creer tener que volver a empezar. Pero también pensaba que por algo se había terminado y estaba convencida que tenía que seguir adelante.


En uno de esos encuentros armados, ésta vez por un compañero de trabajo, quedé deslumbrada. Estábamos jugando al bowling con los chicos de la oficina y cayó él de “sorpresa”. No podía creer lo lindo que era, a los dos minutos ya hablábamos como si nos conociéramos de toda la vida. Al otro día nos vimos solos, fuimos al cine y un día después se quedó a dormir en mi casa. Nos hicimos inseparables y nos reíamos mucho juntos.


Una semana después me mandó un mensajito mi ex, decía que me extrañaba y pretendía pasar a buscar algunas cosas que aún tenía en mi casa.


Contraté un auto, puse todos sus bártulos en el baúl y le pedí que no me llamara nunca más: “¿Te acordás que hasta hace unas semanas te pedía por favor una oportunidad y vos me decías que mejor no, que no perdamos más tiempo, que sigamos adelante? Te hice caso, tengo un hermoso hombre durmiendo al lado mío desde hace una semana. Gracias por el consejo, me ayudaste un montón. Un beso, ahí deben estar por llegar tus cosas”.